Clotilde Mayorga Mayorga
"Soy aborigen de Talamanca. Tsiru es mi nombre en lengua y vengo de Amubre. Somos una comisión de mujeres bribris-cabécares. Hasta no hace mucho tiempo es que las mujeres indígenas empezamos a participar de nuevo en las decisiones de las comunidades. Antes había mujeres que tenían su liderazgo, su autoridad. Estaban los akëkëpas, los mayores, que eran hombres y mujeres. Queremos seguirnos conservando: la lengua, la medicina, las costumbres, porque eso es de nosotros. Llegará un día que hasta nos sacan del rancho porque no tenemos nada nuestro. "A la mujer siempre la han dejado atrás y el hombre ha venido siendo el primero.
Cuando Dios nos hizo, puso hombre y mujer, no dijo sólo un hombre, no dijo sólo una mujer, dijo hombre y mujer. Nosotras las indias trabajamos en el campo, trabajamos igual que los hombres. Tenemos nuestra profesión en el campo, con el machete, con el hacha, con la cocina, todo lo que es tradicional nuestro. Queremos trabajar como la yunta con los hombres, juntos llegamos y juntos progresamos y si nos fue mal, juntos quedamos en la desgracia, porque en un hogar nadie trabaja disparejo.
"Quien más que nosotras conocemos cómo vivimos, qué comemos, cómo dormimos, qué hacemos y hasta cuando nos vamos a morir y de qué nos vamos a morir. Nosotras las indígenas queremos respeto, queremos autonomía, ese es un derecho que no se nos ha querido dar. Desde mucho tiempo atrás, hemos sido las que menos tomaban en cuenta.
"Como le digo, nosotras las mujeres, las de más abajo, nos estamos organizando. Ahora tenemos un grupo de mujeres solas, el grupo Nosotras, que luego nos integramos a la Comisión de Mujeres Indígenas. Nosotras está integrado por 42 mujeres que están a cargo de sus familias: viudas, separadas, solteras. Con este grupo hacemos un sólo "amarre" para trabajar unidas, para los proyectos y los problemas indígenas. "¿Por qué una mujer no indígena es la que sabe dónde se van a pedir los dineros, dónde se hacen todas las vueltas? ¿Por qué no enseñarnos a nosotras? Esas son las aspiraciones nuestras, que nos tengan en cuenta, que nos asesoren. Que sea la mujer indígena, la que va a ser la coordinadora y la que habla con su pueblo, porque nosotras tenemos nuestra propia lengua y nos entendemos mejor en ella.
"Nosotras pensamos que si seguimos estando allí, criando chiquitos, todos los días en ese fogón, de allí nunca vamos a salir. Sabemos que somos la mamá de diez, doce hijos, pero de ahí no pasamos. Nosotras somos importantes, nosotras valemos, nosotras podemos.
"Yo hablo bribrí. A mí me lo enseñó mi abuelo. Como queremos conservar la lengua nuestra, pedimos que se nos dé un espacio a las madres indígenas para ir a enseñar a las escuelas y colegios, a enseñarles en bribrí a los alumnos. Porque la mayoría de jóvenes que se han preparado no habla bien esta lengua. No somos blancas, somos bribris y si no lo hablamos bien, entonces andamos mal.
"Eso es parte del proyecto de Ley para la Autonomía de los Pueblos Indígenas. Ese proyecto nos afecta a nosotras. Necesitamos asesoría, porque se levanta esa Ley y no estamos preparadas, porque la mujer indígena no tiene conocimiento de leyes. Unidas nos preparamos para hacerle frente a los problemas. Pedimos que se nos respete. ¡Nooo, esto no puede seguir así!
Este es el testimonio de Clotilde Mayorga Mayorga, que fue recogido por la periodista Mayela Rodríguez Lobo cuando ella visitó la Asamblea Legislativa para abogar por la Ley de Autonomía para los Pueblos Indígenas
9/8/07
QUEREMOS RESPETO Y AUTONOMIA
en 1:44 Publicado por Rykardho
Etiquetas: bribris, conservación, costumbres, indigenas, ley indigena
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