3/10/07

Otro 12 de Octubre más

Por Johano Negrete
A partir del 12 de Octubre del año 2006, ahora en Venezuela se llama oficialmente Día de la Resistencia Indígena. Yo fui educado en celebrar ese día con el nombre de Día del Descubrimiento de América o también como Día de la Raza (entendiéndose por esto el día de la fusión de las razas).
En Venezuela ha comenzado una polémica y una decisión oficial acerca de la denominación del 12 de Octubre. Tanto que la estatua de Cristóbal Colón fue derrumbada por una agrupación de gente, sin que la policía interviniera, y a pesar de una supuesta condena oficial del hecho lo cierto que la estatua va a pasar una larga temporada de vacaciones.

Comentábamos el otro día en una pequeña reunión de la Esperanto-Amikaro estos cambios de nombres y si el Día de la Resistencia Indígena era o no apropiado, ya que una parte del caso en los últimos tiempos rechaza el nombre de Descubrimiento por ofensivo.

Así los descendientes, que se resisten a ser descubiertos (los No descubiertos, como alguien ha ironizado), se inclinaron inicialmente por la denominación de Día del Encuentro, y hoy oficialmente por el Día de la Resistencia Indígena. El nombre de América aparece fuera de este contexto, pero lo cierto es que a partir de ese día este continente inmenso, que tenía diversos nombres en las lenguas indígenas, nace con el nombre de América (por accidente histórico, es decir, un honor inmerecido al navegante, que no tenía los méritos suficientes para eso). Pero el hecho de verdad es que en ese día nace América tal como ahora es conocida por todos los países.

Nuestro continente es una fusión de razas y pueblos venidos de otros países europeos, y sobre todo también de África, como para optar por el nombre de Resistencia Indígena. Es como colocar toda la balanza en un solo lado, dentro de la complejidad de lo que es hoy nuestro continente. Si bien nadie deja de ser solidario con los pueblos indígenas, que sufrieron la expropiación de sus vidas por un depredador europeo, tenemos que ver con más calma el asunto a 500 años de distancia, pues a partir de ese día todo cambió, no sólo en América, sino también Europa y África y algo nuevo, desmesuradamente nuevo, surgió aquí.
España ha declarado el 12-O día de la fiesta nacional de España, o sea, Día de la Hispanidad. Eso se entiende desde el punto de vista de los españoles, pues si hay algo principalísimo de lo que ellos se sienten orgullosos, es la de haber creado tantas naciones con el sello de la lengua y la cultura hispánicas. Yo propondría aquí, en contraposición, que el 12-O se llame Día de América, pues así tenemos que ver el asunto desde este lado del Atlántico, pero esta propuesta tiene un inconveniente serio.
Los norteamericanos, que se han apropiado (robado), y con el consentimiento europeo, el nombre de América para sí mismos, terminarían tomándose el 12-O como fiesta nacional de ese país sin nombre llamado USA, porque la excusa es que unitedstateser (estadounidense) suena grotesco en inglés y porque todos los países americanos tienen un nombre propio de país, excepto ellos. Muy bien podrían llamarse norteamericanos para distinguirse de México y Canadá. Pero no, ellos se decidieron por el nombre completo del continente, ya que en principio nada impide legalmente que cualquiera de nuestros países se integre (o sea absorbido) a la Unión como un Estado más (el sueño de unos cuantos)
Curiosamente en el idioma internacional Esperanto el nombre de USA es Usono y el gentilicio usonano. Cuestión aceptada de buena gana por los esperantistas norteamericanos. ¡Por fin un idioma con un nombre propio para ese país, y no las simples siglas de una sociedad!. Mientras que en casi todos los países europeos, por americano se entiende el ciudadano estadounidense, para ellos lo que resta es América del Sur o Sudamérica, o sea, el Sur del continente. Llama la atención ver cómo en Venezuela tanta gente, de cualquier tendencia política, sigue inconscientemente aplicando el término americano a nuestros vecinos del norte, dejándose así arrebatar el nombre por el discurso dominante.
Tal como están las cosas resulta difícil cambiar el curso de la historia en este sentido de las asignaciones verbales, pero la interpretación cobra aquí la mayor importancia en los repliegues del lenguaje. Lo que antes era positivo, ahora puede ser negativo, y viceversa.
Así Descubrimiento con mayúscula, que suena bien, puede llegar a tener el mismo sentido peyorativo, que un día adquirió Inquisición (Inquisitio), a partir de su tan ingenuo significado original de inquirere: inquirir, investigar, averiguar.

1 comentario:

Amador Rocha dijo...

Este es uno de los artículos más lúcidos e inteligentes que he encontrado acerca del tema del 12 de Octubre y de la usurpación del gentilicio americano por parte de los estadounidenses. Lo que he encontrado sobre todo en algunos europeos seguramente que conocen mexicanos, es que llaman gringos a los estadounidenses. En mi opinión la justicia histórica hara con los gringos lo que paso con los aztecas de México, ya que este era su nombre peyorativo, ellos realmente se consideraban y se llamaban Mexicas.